Vamos a fijarnos en la cama con la colcha de ganchillo morada que tenemos a nuestro lado. No es para tumbarse no, es para aprender un poco sobre la relación entre los aromas, los colores y las sensaciones que transmiten.

Abriendo cada cajetín, encontraremos información sobre cada color, energías que nos transmite, aromas que van acordes con él.

Ah una cosa, esta zona es sólo para leer, no para oler.

Visita enológica:

Si el olfato es el sentido clave en las fases olfativa y gustativa, es la vista la que prima en la fase visual. En esta fase de la cata, el color y aspecto visual nos darán las claves para saber que vino tenemos delante, su edad y en muchas ocasiones nos da pistas sobre su origen o elaboración.

Encontramos desde los más amarillos pajizos en blancos jóvenes hasta el caoba oscuro de un px, en tintos jóvenes podemos recorrer desde los tonos más púrpura hasta los teja en los vinos de más edad.

Carteles:

El Color es la impresión producida al incidir en la retina los rayos luminosos difundidos o reflejados por los cuerpos. A todos nos produce una sensación el color y cada uno tiene sus propio gusto sobre un color u otro, pero en general, todos percibimos una reacción física ante la sensación que produce un color, como la de frío en una habitación pintada de azul o la de calor en otra pintada de rojo. Aunque estas impresiones son subjetivas y más cercanas a una interpretación personal, la mayoría de las investigaciones han querido demostrar que son comunes en la mayoría de los individuos, y están determinadas por reacciones inconscientes de estos, y también por diversas asociaciones que tienen relación con la naturaleza.

Los colores expresan estados anímicos y emociones que se traducen en una significación psíquica y una reacción fisiológica.

En una clínica maternal de Mónaco se ha observado que los nacidos prematuros prosperan de manera más satisfactoria cuando son mantenidos en una incubadora iluminada con color rojo-morado, es decir, el color del medio prenatal.

CARACTERÍSTICAS ENERGÉTICAS DE LOS COLORES

El Rojo: Se le denomina el gran energizante, dado que despierta los sentidos y las pasiones. Este potente color es el que más fácilmente registra nuestra vista. Aumenta la tensión muscular, activa la respiración, estimula la presión arterial y es el más adecuado para personas retraídas y con reflejos lentos. Hablaríamos de aromas llenos de vitalidad y que atraen la atención hacia nosotros. Los aromas florales como rosa y jazmín son los más indicados. También romero, Ylang-Ylang y árbol del té.

El Naranja: Se asocia a la salud, el optimismo, el estímulo. Dicen que es el más generoso de los colores y centro de equilibrio entre la líbido y el espíritu. Actúa para facilitar la digestión. La persona que los utiliza huye de fragancias que únicamente se perciben si te acercas mucho. Nos sugiere aromas frescos que al olerlos estimulan los sentidos como la menta, el laurel o el musgo.

El Amarillo: Nos invita a la alegría, la claridad, la longevidad y el optimismo. El amarillo no es bien tolerado por las edades extremas: los bebés lloran más en habitaciones amarillas y las personas mayores tienden a rechazar el amarillo. Este color nos sugiere aromas dulces como la canela, naranja, bergamota, limón, incienso e hinojo.

El Verde: Este color se corresponde con el centro del espectro cromático. Simboliza la paz, la alegría, el crecimiento, la compresión, la serenidad, el rejuvenecimiento y la sensibilidad. Por ser el color de la naturaleza sugiere aire libre y frescor. Aromas como el sándalo, la manzanilla, la lavanda o el pomelo se podrían asociar a este color.

El Azul: Nos sugiere una actitud contemplativa. Se relaciona con la seriedad, la soledad y la serenidad. Actúa como calmante y reduce la presión sanguínea. Los aromas que se unen a este color desprenden elegancia, siendo astringentes como la lavanda o beneficiosos como la mirra, el tomillo, el jazmín o el sándalo.

El Violeta: Algunos lo relacionan con la humildad, la religión, la tolerancia, la melancolía y la intuición. Es un color cuyos matices se extienden desde el añil, índigo, pasando por el lila hasta el morado. Nos sugiere aromas que desprenden misterio y sensualidad como las fragancias orientales. También serían compatibles el eucalipto o el ciprés.