Entre 1252 y 1284 reinó Alfonso X. El gótico era un estilo arquitectónico popular en España en el siglo XIII. El rey Alfonso construyó su palacio gótico junto al patio del Crucero.
El primer registro de obras durante el reinado de Alfonso data del 22 de marzo de 1254, cuando ordenó la construcción de un conducto para transportar agua desde el acueducto de Caos de Carmona hasta el interior del Alcázar.
Carlos I reformó el palacio gótico del Alcázar, pero se conservó la estructura gótica de la planta baja. Los zócalos de los muros están adornados con azulejos realizados por Cristóbal de Augusta entre 1577 y 1578, durante el reinado de Felipe II.
Capilla
En este lugar probablemente se encontraba la capilla de San Clemente, construida en 1271. Actualmente está presidida por un retablo que representa a la Virgen de la Antigua, realizado en el siglo XVIII por Diego de Castillejo y que contiene una copia anónima del de la catedral de Sevilla.
El Gran Salón
El Gran Salón, también conocido como Salón de Bóvedas o Salón de Celebraciones, alberga cuatro sargas encargadas por Alfonso XIII al pintor Gustavo Bacarisas para el Pabellón Real de la Exposición Iberoamericana de 1929. Las pinturas de las sargas están inspiradas en el viaje de Colón.
Está flanqueada por una sala más pequeña, conocida como sala Cantarera, que se utiliza para exposiciones temporales desde 2015.
Galería de tapices
En el siglo XVIII fue completamente reconstruida. La fachada de esta sala es la fachada sur del patio del Crucero.
Está adornada con seis tapices que representan la conquista de Túnez por Carlos I en la década de 1730. En el siglo XVI, el taller de Willem de Pannemaker realizó una serie de tapices flamencos que representaban la conquista de Túnez por Carlos I, con dibujos de Jan Cornelisz Vermeyen (que había estado presente en el acontecimiento como pintor de la corte) y Pieter Coecke van Aelst. Zenón de Somodevilla y Bengoechea, marqués de la Ensenada, planificó la producción de nuevos tapices en el siglo XVIII para evitar el desgaste causado por el uso constante de los tapices flamencos en el palacio de Madrid. La Real Fábrica de Tapices encargó a Jacobo Vandergoten el Joven la creación de estos tapices en 1732. Trabajó en este proyecto con Andrea Procaccini y su alumno Domenico Maria Sani. Jaime Alemán, que fue supervisado por Procaccini, los creó con calcos. Seis de los diez tapices realizados en la década de 1730 se encuentran en esta sala del Alcázar de Sevilla, y los otros cuatro en Madrid. El mapa, La toma de la Goleta, La toma de Túnez, Los campamentos del ejército en Rada y El desembarco de la Goleta son algunos de los que se encuentran en el Alcázar de Sevilla.