El Anticuario es un espacio museístico dentro de las ruinas de Pompeya. Su construcción data de 1861, pero lamentablemente, en 1943, sufrió graves daños debido a intensos bombardeos durante la Segunda Guerra Mundial. Posteriormente, en 1948, se llevó a cabo su reconstrucción siguiendo modernos principios museológicos, con el propósito de proporcionar una visión integral de la historia de la ciudad.

Este espacio se compone de cuatro salas: la primera exhibe testimonios de la Pompeya anterior a la influencia samnita, con un enfoque especial en materiales de la necrópolis de la Edad del Hierro (siglos XI a VII a.C.) en el Valle del Sarno. La segunda sala alberga objetos de los siglos III y II a.C., incluyendo terracotas, cerámicas etruscas y esculturas en tufo. En las terceray cuarta salas se presentan elementos del período romano de Pompeya, que abarcan desde los moldes de yeso de personas y animales sorprendidos por la erupción, hasta objetos de la vida cotidiana y testimonios de la actividad comercial en la ciudad.