Los mayores baños termales terapéuticos de Europa se encuentran en Budapest, la capital de Hungría, y se conocen como los Baños Széchenyi (Széchenyi-gyógyfürd). Sus aguas proceden de dos manantiales termales con temperaturas de 25 °C y 77 °F, respectivamente. Su nombre suena a Széchenyi.
Estas aguas termales contienen principalmente sulfato de calcio, magnesio y bicarbonato, junto con cantidades considerables de flúor y ácido metabórico. Estas aguas se recomiendan desde el punto de vista médico para diversas terapias ortopédicas y traumatológicas, como las enfermedades articulares degenerativas, las inflamaciones articulares crónicas y subagudas.
Estos baños están situados en el Parque de la Ciudad, y las estructuras neobarrocas que los albergan fueron construidas en 1913, siguiendo los diseños del arquitecto Gy Czzigler. En aquella época había zonas de baño de vapor para hombres y mujeres con bañeras privadas, además de una zona de baño pública.
En la actualidad, el complejo cuenta con 3 piscinas exteriores y 15 cubiertas tras su ampliación en 1927. Se perforó un nuevo pozo ya que el pozo artesiano termal original, que se había ampliado, ya no podía cumplir su función. En 1938 se terminó la segunda fuente termal.
Hoy en día, prácticamente todo el complejo está abierto al público, y el balneario ofrece la posibilidad de alquilar o comprar toallas y bañadores. La afluencia es mayor los fines de semana y los días festivos que entre semana.
Además, una estación de la línea amarilla M1 del metro de Budapest lleva el nombre de los baños (metro Millennium).