El Teatro Colón, ubicado en Buenos Aires, Argentina, es reconocido mundialmente por su tamaño, acústica y trayectoria, siendo considerado uno de los mejores teatros líricos. Según el experto en acústica Leo Beranek, es el mejor para ópera y el segundo mejor para conciertos. Comparado con otros grandes teatros como la Scala de Milán y el Metropolitan Opera House, es un punto de referencia para artistas y amantes de la música. El Colón alberga a la Orquesta Estable, el Coro Estable, el Ballet Estable y la Orquesta Filarmónica de Buenos Aires, además de ofrecer diversas actividades formativas y experimentales.

Es un teatro de temporada que produce sus propios espectáculos, contando con talleres especializados para la escenografía y el vestuario. Entre 2001 y 2010, fue restaurado y modernizado sin alterar su acústica ni arquitectura original. Durante esta restauración, sus actividades se trasladaron a otros espacios de la ciudad y reabrió en 2010 como parte de los festejos del Bicentenario de Argentina.

El Teatro Colón ha funcionado en dos edificios: el primero en la Plaza de Mayo hasta 1888 y el actual frente a la Plaza Lavalle, inaugurado en 1908. Este teatro ha acogido a figuras prominentes de la ópera, música clásica y ballet, tanto internacionales como locales. Su historia incluye la creación de cuerpos estables en los años 1920 y su municipalización en 1931, además de políticas de democratización del acceso a la música impulsadas y revertidas en distintas épocas.

El financiamiento original del teatro provino mayoritariamente de iniciativas privadas y aportes significativos de filántropos, como Ángel María de Estrada. Aunque el gobierno de Buenos Aires también brindó apoyo financiero y terreno para su construcción, gran parte del proyecto se financió mediante donaciones privadas y eventos de recaudación.

El edificio actual, con una superficie total de 58,000 m², cuenta con dependencias como el Instituto Superior de Arte y diversos talleres, lo que lo distingue de otros teatros. La decoración del teatro, especialmente en áreas como el foyer y el Salón Dorado, es rica y elaborada, con materiales y obras de arte que resaltan su magnificencia. La sala principal, con capacidad para casi 3,000 espectadores, es una de las mayores del mundo y destaca por su estilo ecléctico y rica ornamentación. La cúpula de la sala principal fue decorada por Raúl Soldi en 1966, y es un elemento distintivo del teatro.

El Instituto Superior de Arte del Teatro Colón, fundado en 1960, ha formado a muchos artistas de renombre internacional en música y danza. Este instituto continúa siendo un semillero de talentos, contribuyendo significativamente al panorama cultural argentino y mundial.