El Mercado de San Miguel, ubicado en la plaza del mismo nombre, junto a la Plaza Mayor de Madrid, es un mercado de titularidad privada cuya característica más remarcable es que conserva su estructura original de hierro de principios del siglo XX.
Tiene dos plantas y una superficie de 1200 metros cuadrados.
Localizado en el centro del Madrid histórico y con más de 10 millones de visitantes al año, el Mercado de San Miguel es el templo gastronómico de la ciudad de Madrid, la esencia contemporánea de todos los rincones de la gastronomía española.
Desde el mejor jamón ibérico hasta el marisco más fresco llegado diariamente de Galicia, los arroces mediterráneos o los quesos más especiales de Castilla, Asturias o País Vasco. Productos y vinos de primera calidad que llegan de todos los rincones de España.
Inaugurado en mayo de 1916 como mercado de abastos, en mayo del 2009 pasa a convertirse en el primer mercado gastronómico.
En la época medieval esta zona era mercado abierto, rodeado de puestos (cajones) dedicados a la compra-venta de los productos artesanales producidos por los gremios.
En la época de José Bonaparte se mandó derribar la antigua iglesia parroquial de San Miguel de los Octoes. En su lugar quedó una plazuela en la que se proyecta construir el mercado que heredaría el nombre de la antigua parroquia.
En 1809 era un mercado "al descubierto" especializado en la venta de pescado.
Fue construido el mercado cerrado entre 1913 y 1916 bajo la supervisión del arquitecto Alfonso Dubé y Díez, inspirado en otros mercados europeos realizados en hierro al estilo del de Las Halles de París.