Caballerizas

Las Grandes Caballerizas (Grandes Écuries) del Palacio de Versalles, situadas en la plaza de Armas frente al Palacio y flanqueadas por las avenidas de Saint-Cloud y París, forman junto a las Pequeñas Caballerizas el conjunto de las Caballerizas Reales, donde trabajaron unas mil personas durante el reinado de Luis XIV. Diseñadas por el arquitecto Jules Hardouin-Mansart, su construcción comenzó en 1679 y finalizó en 1682.

Las caballerizas estaban equipadas con un picadero donde se guardaban los caballos de caza y de guerra del rey y albergaban la Escuela de Pajes. En el siglo XVIII, las Caballerizas Reales llegaron a contar con más de dos mil caballos. Durante el Antiguo Régimen, las Grandes Caballerizas eran dirigidas por el caballerizo mayor de Francia y albergaban la Escuela de Pajes del rey, que formaba a los futuros oficiales de caballería. Ser admitido como paje del rey era un gran honor, solo superado por los Honores de la Corte. Los pajes también acompañaban al rey en sus desplazamientos nocturnos, portando antorchas para iluminar su camino.

Entre 1680 y 1830, las Grandes Caballerizas también acogieron la Escuela de Versalles, origen de la equitación artística francesa. En 1770 se realizó una restauración importante, y entre 1793 y 1794 se suprimieron los emblemas reales de los frontones. Otra restauración significativa tuvo lugar entre 1810 y 1811. Desde 1854, el ejército ocupó las caballerizas, y en 1978, Gerald van der Kemp instaló en ellas la colección del Museo de Carruajes de Trianón.

En el siglo XX, las caballerizas fueron clasificadas como monumento histórico en 1913. En 1985 se abrió al público el Museo de las Carrozas, que cerró temporalmente en 2007 para una ampliación y reabrió en 2016 gracias al patrocinio de la Fundación Michelin. En 2002, se restauró el uso original de las caballerizas y en 2003 se inauguró la Academia Ecuestre Nacional del Dominio de Versalles, dirigida por el jinete Bartabas. El picadero rectangular fue rehabilitado por el arquitecto Patrick Bouchain.

Las Grandes Caballerizas tienen una planta trapezoidal en forma de herradura, organizadas en torno a cinco patios: un gran patio principal rodeado por una columnata en hemiciclo y dos edificios laterales simétricos, dos patios medianos cerrados y dos pequeños patios laterales abiertos, llamados "patios del estiércol". Las entradas laterales desde las avenidas de Saint-Cloud y de París están separadas por un alto muro interrumpido por un pórtico con frontón.

El diseño arquitectónico incluye muros de piedra y ladrillo rojo revestido de paramento de piedra, con una sucesión de arcadas en planta baja. La primera planta se ilumina mediante ventanas rectangulares, y las mansardas de la última planta cuentan con claraboyas. El interior presenta galerías simples, mientras que las Pequeñas Caballerizas tienen una doble galería separada por una columnata. Las cubiertas de las galerías están compuestas por tramos de bóveda vaída.

Los grupos escultóricos, destacando un conjunto de tres caballos rampantes en el tímpano, obra de Pierre Granier y Jean Raon, adornan el edificio. Los frontones de los pabellones y porches también están esculpidos con cabezas de caballo y otros elementos decorativos. En 2016, con la reapertura de la Galería de las Carrozas, se instaló el lema "Écuries du Roi" sobre la reja de acceso, resaltando su histórica conexión con la realeza.

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