El Castillo de Burgos es una fortaleza situada en la ciudad española de Burgos. Se encuentra en la cima del Cerro del Castillo, a 75 metros sobre el nivel de la ciudad. La primera torre fue planteada por el Conde Diego Krasomi durante el proceso de recuperación, en 884 debido a la importancia del lugar de defensa, se gastaron el castillo y los factores defensivos más complejos.
Recientes excavaciones arqueológicas han descubierto los restos de la Puerta Sur. Es una muralla rota, abriendo un vano rodeado por dos torres semicirculares. La puerta principal, que se abre a la fachada noroeste, tiene un paso en arco.
Parte de un complejo subterráneo, el pozo (comúnmente conocido como Cueva del Moro) tiene galerías de más de 300 metros de largo. Data de los siglos XII y XIII, aunque los primeros mensajes datan de 1475, durante el sitio de Isabel la Católica, época de guerra por el trono, defendida por el pueblo de Juan la Beltranej.
Un incendio en 1736 provocó la destrucción del interior de madera, las vigas, los techos y los techos. Durante la Guerra de la Independencia, la ciudad recuperó su posición estratégica, y los franceses iniciaron una reconstrucción temporal, lo que supuso un cambio significativo del lugar.
Durante el resto del siglo XIX se utilizó esporádicamente durante las Guerras Carlistas. Eduardo de Oliver Copons escribió un libro sobre fortificaciones a finales del siglo XIX.
El castillo también se utilizó durante la Guerra Civil de 1936, formando el sistema de defensa aérea de la ciudad.