Situada en el ábside de la catedral la capilla gótica, tiene forma poligonal cerrándose con dos líneas de vidrieras de las que solo la superior es visible hoy en día al estar tapada la otra por el retablo principal del templo. Se inicia su construcción en 1388 considerando este momento el inicio de construcción de la parte principal de la catedral gótica.
En su interior se puede observar de izquierda a derecha:
El Sepulcro con escultura orante de Juan Arias de Villar, obispo de Oviedo entre 1487 y 1498. Se encuentra vacío pues los restos mortales se trasladaron a la Catedral de Segovia.
EL Retablo Mayor, que está dedicado a San Salvador. Se inicia su construcción por orden de Valeriano Ordóñez Villaquirán en 1511 por Giralte de Bruselas siendo finalizado en 1531 por Juan de Balmaseda y Miguel Bingeles. En la decoración pictórica intervienen León Picardo y en menor medida Alonso Berruguete. En sus 12 x 12 m se representan 24 escenas de la vida de Jesús.
En el siglo XVII se realiza la construcción de la girola compuesta de cinco pequeñas capillas radiales. En ella se encuentra la Sacristía y la Capilla de Covagonga, lugar en que reside el sepulcro del obispo Gutierre de Toledo en un lateral, y bajo el altar, los restos de San Melchor de Quirós, primer santo asturiano.